La mayoría de historiadores consideran que el húngaro Ladislao Kubala fue, en los años 1950, la primera gran figura de talla internacional que militó en el conjunto barcelonista. A partir de 2006, el club se comprometió a realizar una donación no inferior a 1,5 millones de euros a Unicef, para que esta lo destine a mejorar las condiciones de vida de los niños de todo el mundo.